Durante un reciente estudio realizado en los EE.UU. se preguntó
a dos grupos de expertos si el ordenador era un aparato de tipo
femenino o masculino.
El primer grupo estaba formado por mujeres, mientras el segundo
por hombres. Cada grupo debía encontrar razones para justificar
el género masculino o femenino del ordenador.
EL GRUPO DE MUJERES LLEGO A LA CONCLUSIÓN DE QUE EL ORDENADOR
ERA MASCULINO, POR LAS SIGUIENTES RAZONES:
* Para captar su atención hay que encenderlo.
* Está lleno de información pero no tiene ninguna
imaginación.
* Se supone que tiene que ayudarte, pero la mitad del tiempo
él es el problema.
* Desde el momento que tienes uno, te das cuenta de que si
hubieses esperado un poco más hubieses conseguido un modelo
mucho más potente.
EL GRUPO DE HOMBRES, POR SU PARTE, LLEGO A LA CONCLUSIÓN DE QUE
EL ORDENADOR ERA FEMENINO POR LAS SIGUIENTES RAZONES:
Nadie, salvo su creador, comprende su lógica interna.
* El lenguaje que utiliza para dialogar con otros ordenadores
es totalmente incomprensible.
* El más pequeño de los errores es almacenado en la memoria y
puede surgir en el momento más inoportuno.
* Desde el momento en que tienes uno, descubres que tienes
que gastarte la mitad del sueldo en accesorios.
* Si no tocas en el sitio correcto, te monta un pollo de la
leche