Microsoft ha cerrado la operación de compra de la compañía de telefonía por internet Skype, que hoy pasa a ser una nueva división de negocio de la compañía responsable de Windows, después de cinco meses de gestiones.
La adquisición, valorada en US$ 8.500 millones, se anunció el pasado 10 de mayo, pero no se había hecho efectiva hasta ahora, indica Microsoft en una nota de prensa.
El pasado 7 de octubre, la Comisión Europea daba su visto bueno a la compra, considerada la más agresiva de la historia del mayor fabricante mundial de software, porque ha determinado que la transacción no impedirá la competencia efectiva en el Área Económica Europea.
A pesar de dar por cerrada la adquisición, Microsoft indica que la operación aún se encuentra bajo supervisión en determinados países.
Con la inclusión de Skype como unidad de negocio de Microsoft, el consejero delegado de la compañía de telefonía por internet, Tony Bates, pasa a ser director.
Microsoft asegura que Skype seguirá ofreciendo sus productos de la misma manera que lo ha venido haciendo, aunque a largo plazo se integrará en sus dispositivos.
"Microsoft y Skype seguirán centrados en su objetivo común de conectar a las personas a través de todos los dispositivos y en acelerar sus esfuerzos para transformar las comunicaciones en tiempo real tanto para los consumidores como para los clientes empresariales", informa la compañía responsable de Windows.
Bates espera que con la entrada de Skype en Microsoft se alcancen los mil millones de usuarios diarios conectados a los servicios de telefonía por internet.
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