el 15 de Julio pasado, la prensa gráfica publicó una edición especial dedicada al fenómeno harry potter...me llamó la atención este caso en especial aki les dejo la nota completa, ta interesante la historia
EMHO---es increible como pueden influir estas cuestiones en la vida de la gente...
LPG lo tituló:
Una “mugglecita” entre nosotrosEn una noche de tormenta llegamos a casa de los Argüello Jandres. Ahí nos esperaba Hermione, la bruja “muggle” de “Harry Potter”. La chica más atenta de Hogwarts se transforma en una hermosa bebé de menos de un año. Y no se trata de ningún truco de magia.
Hermione Argüello Jandres dice su partida de nacimiento, sacada en Cuscatancingo en el año 2006. Ahí, David Argüello, de 50 años, decidió asentar a su hija “para que no se pusieran raros con el nombre”.
Don David fue a la Alcaldía de Cuscatancingo acompañado de su hija Pamela, de 18 años, y dijeron el nombre que querían ponerle a la bebé: “Celia Hermione Argüello Jandres”. “Cuando llegamos, la señora (que tomó los datos) nos preguntó cómo le íbamos a poner y le dijimos el nombre, pero se lo escribimos”, cuenta don David, técnico en reparación de computadoras y que tiene tres hijos más. La trabajadora de la alcaldía preguntó que por qué Hermione (Jermaiouni), entonces Pamela aconsejó a su padre: “Decile que mi abuela materna se llamaba Hermione Jandres y que era inglesa”. La trabajadora de la alcaldía lo creyó, Jandres debió sonarle a inglés, piensan ellos, pero el truco de los Argüello Jandres todavía les arranaca carcajadas.
Hermione está por cumplir un año y cabalísticamente enlaza su cumpleaños con la presentación del séptimo y último libro de “Harry Potter”, de la inglesa J.K. Rowling. Cuando ella, el 30 de julio, tenga ya su primer año de vida, habrán pasado nueve días desde que los millones de lectores del niño mago sabrán si Harry Potter ha muerto o no en el último libro de la saga.
El nombre de la bebé, claro, salió del libro. “Al ver que Hermione no era muy común y algo raro, decidimos ponerle así”, dice don David. Lo decidieron él y Pamela. La mamá, Celia del Carmen de Argüello, no lo supo hasta que vio la partida de nacimiento. Y más carcajadas de don David, su hijo mayor David, de 21 años, y Pamela: no le preguntaron si estaba de acuerdo.
Hermione no habla, pero ya causa conmociones. “En el colegio nadie me cree que así se llama mi hermana”, dice Pamela, mientras la bebé pasea por la casa en su andadera o se deja chinear y cargar sus 19 libritas mágicas. Es la hija menor de un matrimonio maduro, “una casualidad”, dice el padre, y hace 15 días, cuando decidieron sacarle el pasaporte, el nombre era impronunciable para la trabajadora de migración.
A la familia se le ocurre que muchos niños no puedan pronunciar el nombre o simplemente se burlen de ella.
“Pueden preguntarle que dónde dejó a Harry Potter”, dice David, su hermano, pero el padre está seguro de la decisión: el nombre le gusta, es sonoro, extraño, y la actriz inglesa Emma Watson lo cautivó en las películas.
Hay algo más: “Realmente el personaje de Hermione es una niña que es bien inteligente y dedicada, es bien estudiosa, y es la que anda diciéndoles (a Ron y Harry): ‘No hagan esto porque las reglas son tales y tales’. Es la que les va poniendo el freno, la sensata”, dice don David. “Son cualidades que uno quisiera que tuvieran sus hijos: que sean sensatos, que vean bien lo que hacen, ¿qué no quisiera uno para sus hijos?”
¿Quién desaparece los vasos?
Aunque no es bruja, o no lo ha descubierto aún, Hermione ya desaparece cosas en su casa de la colonia La Campiña. Su papá cuenta que, en silencio y en su andadera, se acercó al “pantry” y abrió las puertas. Ahí se encontró con todos los vasos de vidrio de la casa, y los derribó. Cayeron al piso, se quebraron, la bebé no se hirió, pero se asustó y se puso a llorar. “Desde entonces, solo hay vasos de plástico”, dice su hermano David.
Cuando Hermione crezca y quiera saber el origen de su nombre, le van a enseñar las películas y los libros y le van a decir que de ahí salió su nombre. Además, ya mucha gente asocia ya el nombre de la niña con los libros o la película.
Don David añade un punto clave en el fenómeno cultural que ha causado la saga de “Harry Potter”: en el futuro va a ser raro que alguien no sepa quién es Harry Potter, “porque las generaciones van a ir cambiando poco a poco”, y el libro será un clásico de la literatura de fantasía. “Hay personajes de ciertas telenovelas que se vuelven populares y en algún momento las mamás les ponen el nombre a los hijos. Posiblemente en este caso como es un personaje inglés eso llame la atención. La gente espera que se llame Rosario o María, un nombre más común”, dice el papá.
Hermione está dentando. Sus dientes no son tan grandes como los de la niña del libro, pero al igual que la ya mítica Hermione Jane Granger es una “muggle” (hija de humanos).
Los libros de J.K. Rowling llegaron a la casa de los Argüello Jandres gracias a David, el hijo mayor, de 21 años. En la biblioteca de la UCA, y luego de reservas y esperas por los tomos de la saga de la inglesa, David consiguió los libros y los llevó a su papá. “Mi papá lee por las noches, entonces empezó a leerlos y a que le gustaran”, dice David.
fuente:
http://archive.laprensa.com.sv/20070715/dominical/822441.asp