Llega el director de la CIA muy apurado a ver al Presidente y le dice:
- "¡Señor presidente, hay que hacer algo...! Esos malditos rusos han enviado unas naves enormes a la Luna, y la están pintando de rojo..."
- "¿Ah sí...? ¿Cuánto llevan pintado ya...?"
- "¡Como una quinta parte, señor presidente...!"
- "Está bien. Manténgame informado."
Un rato después llega el director de la CIA otra vez a todo correr:
- "¡Señor presidente...! ¡Ya llevan la mitad de la Luna pintada de rojo...!"
- "Mantengamos la calma, señor director. Manténgame informado de sus avances."
Al rato, llega el director de la CIA todo desconsolado:
- "¡Señor presidente: los rusos acaban de pintar TODA la Luna de rojo...!"
- "¿Toda?"
- "¡Toda!"
- "Muy bien. Llame a Cabo Cañaveral y dígales que envíen una nave cargada de pintura blanca, para que le pinten encima: Tome Coca Cola."