Siempre hay alguien que salta con éstos chistes, no le hallan la gracia a las verdades.
Me he cagado de la risa, es que quizá nadie de ustedes ha ido a la Asamblea, esa gente no merece nuestro respeto, suficiente con el dinero que ganan, ellos se acuestan contentos cada día de pago, así que da más pena tener tatas de diputados, que tatas balarínes de table gays.